El espíritu es el que da vida. Juan 6:62-63

"¿Pues qué, si viereis al Hijo del Hombre subir adonde estaba primero? El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida."

CONCLUSIONES.

Somos una generación donde nos preocupamos mucho de la apariencia física; de cómo lucir mejor, de como sentirnos mejor y a veces de cómo ser más saludables; sin embargo, todo lo que hagamos en pro de nuestra carne de nada aprovecha; pues un día nuestro cuerpo morirá y tendrá que descomponerse y como resultado, solo quedará nuestro esqueleto.  Hay que aclarar que bíblicamente sí hay que cuidar de nuestro cuerpo que es templo del Espíritu Santo; sin embargo la Palabra también rechaza el orgullo y la vanidad que conllevan a hombres y mujeres a hacer cosas que satisfagan su ego o que produzcan admiración en los demás; esto es vivir para la carne.

El espíritu es el que da vida, lo dijo Jesucristo y también aclaró cuál es ese espíritu, que no se trata específicamente del Espíritu Santo de Dios; sino del Evangelio de Jesucristo (las palabras que yo os he hablado).  Estas palabras, al escudriñarlas, meditar en ellas, guardarlas en nuestro corazón y ponerlas por obra, despiertan y santifican el alma y el espíritu del hombre; preparando al hombre espiritual para la vida eterna en el reino de los cielos.

Por eso, trate bien su cuerpo, cuídelo, aliméntelo; pero nada de alimentar el orgullo y la vanidad.  Y aún más importante que esto, es alimentar el alma y el espíritu con la verdadera comida que es la Palabra de Dios.

Que Dios los bendiga grande y abundantemente.