Como ser sabio. 1 Corintios 3:18-20.
“Nadie se engañe a sí mismo; si alguno entre vosotros se cree sabio
en este siglo, hágase
ignorante, para que llegue a ser sabio. Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios; pues escrito está: El prende a los sabios en la astucia de
ellos. Y otra vez: El Señor conoce los
pensamientos de los sabios, que son vanos.”
CONCLUSIONES.
Existen dos tipos de sabiduría: La terrenal
y la espiritual. La terrenal proviene
del hombre y la espiritual proviene de Dios.
La sabiduría terrenal ha sido de vital importancia en el mundo moderno,
pues sin ella no habría avances científicos, tecnológicos e industriales. Sin esta sabiduría no habría aviones, no
habría electricidad, no habría telecomunicaciones, no habría computadoras, no
habría televisión, no habría trasplantes de órganos, etc. Podríamos entonces asegurar que esta
sabiduría es buena porque los resultados son también buenos; sin embargo,
debemos saber que también se ha usado en la creación de armas nucleares, en
dispositivos para el espionaje y las guerras, en armas químicas de destrucción
masiva, en máquinas que están contaminando el aire que respiramos, etc. Por eso dice el texto bíblico que la
sabiduría de este mundo es insensatez
para con Dios; pues esta sabiduría finalmente termina al servicio del mal; o
sea en contraposición a los designios de Dios.
Generalmente la sabiduría terrenal o humana va acompañada de un elemento
que se llama la astucia y esta proviene de las tinieblas. Esta astucia conlleva a la búsqueda de
ventajas y oportunidades en relación con otros seres humanos, lo que finalmente
termina en injusticia, en engaño, en soberbia, en vanidad y en orgullo; por eso
es que esta astucia es del diablo y no de Dios.
El principio de Dios es amor mientras el principio del diablo es la
astucia o la habilidad para engañar y mentir.
Entonces podemos concluir que la sabiduría terrenal tiene dos elementos
muy dañinos: insensatez y vanidad. Son
vanos porque inflan el pensamiento de los hombres llevándolos a la arrogancia y
son insensatos porque carecen de sentido y razón en relación con los propósitos
de Dios. Dios siempre ha querido que
vivamos en paz con el hombre y en armonía con la naturaleza; pero estamos
destruyendo ambas cosas con la sabiduría terrenal.
La sabiduría espiritual es la que proviene de Dios, es la que entrega Dios
directamente al hombre. Esta sabiduría
tiene su principio en el temor a Dios.
Proverbios 9:10 “El temor de
Jehová es el principio de la sabiduría, Y el conocimiento del Santísimo es la
inteligencia.”
¿Entonces cómo puede usted hacerse sabio?
1.
Hágase ignorante.
Debemos entender que es muy poco lo que conocemos; pero mucho lo que nos
falta por conocer. Dios nos dice que nos
hagamos ignorantes; pues esto conlleva a la humildad y a la pobreza de espíritu
y ambas cosas nos acercan a Dios quien es la fuente de la eterna y verdadera
sabiduría.
2.
Practique el temor a Dios.
Este temor no significa tenerle miedo a Dios; sino que por causa del temor
a Dios, entonces nos alejamos del pecado y nos hacemos obedientes a su Palabra,
y cuando hay obediencia, entonces somos verdaderos hijos de Dios y al ser
verdaderos hijos, entonces Dios nos bendecirá con sabiduría y conocimiento de
lo alto. Proverbios 3:7 dice: “No seas sabio en tu propia opinión; Teme a
Jehová, y apártate del mal” Cuando hay temor de Dios, entonces nos
abstenemos de celebrar fiestas paganas como el día de Halloween, debido a que
esto es una celebración para las tinieblas, enmascarada o camuflada bajo la
fiesta de los niños. ¿O usted cree que
las brujas, los duendes, los demonios, los vampiros, los fantasmas, las lápidas
de cementerio y en general todos los disfraces son de agrado para Dios? Dios es santo y no comparte su gloria con
nadie, aún menos con el diablo y sus seguidores. ¿Cómo podría alguien alegrarse
cuando le están haciendo fiesta a su enemigo?
Recordar que el diablo es el archienemigo de Dios y siempre ha tratado
de destruir su creación, empezando por el hombre que fue hecho a imagen y
semejanza de Dios.
Dios creó el universo visible e invisible junto con todas las criaturas y
cosas que existen dentro de ellos, ¿acaso esto no le brinda suficientes méritos
a la sabiduría de Dios? Sin duda alguna,
si el hombre anduviera de la mano de Dios, en vez de desarrollar la sabiduría
material, hubiera recibido sabiduría espiritual, la cual es creativa y no
destructora como sí lo es la material.
Si el hombre tuviera la sabiduría de lo alto, todos los avances
tecnológicos hubieran traído mejoras en la vida del hombre, hubieran traído paz y
no guerras, hubieran traído salud y no enfermedad, hubieran traído bendición y
no pobreza.
¿Quieres ser sabio? Entonces teme a Dios.
¿Quieres ser inteligente? Entonces conoce a Dios a través de su Palabra
y obedécele en todos sus mandatos.
Que Dios los bendiga grande y abundantemente.